"Cuando Trujillo eso no pasaba" y "Hace falta un Trujillo", son frases recurrentes que uno escucha casi a diario en Santo Domingo. La figura del dictador vive aun en el recuerdo de muchos y sus historia y leyendas son transmitidas a las generaciones actuales con mayor intensidad que la que se le presta a otras personalidades de la historia nacional. Y lo constata esta nota de prensa:
Instalado en el poder por las autoridades estadounidenses tras la invasión y ocupación iniciada en 1924, Trujillo supo liquidar a sus opositores de manera casi científica y convertir el país en su feudo: nada ni nadie se movía sin su permiso.
Ni siquiera la población haitiana se libró de la frialdad con que el ex dictador disponía de la vida humana con fines políticos: se estima que más de 10 mil personas de esa nacionalidad fueron eliminadas a fines de la década de los 30.
Trujillo y sus familiares se enseñorearon en la vida dominicana durante más de tres décadas hasta que una noche de mayo en 1961 fue abatido a tiros cuando se dirigía a su fastuosa residencia en la adyacente provincia de San Cristóbal.
La liquidación del dictador no fue sin embargo el final de su régimen de terror, continuado por su hijo Ramfis, un psicópata que antes de abandonar el país mató a tiros a los sobrevivientes del atentado contra su padre.
Tuvo que pasar algún tiempo para que cayeran las estatuas del hombre que se hacía llamar el Benefactor y que esta capital recuperara el nombre de Santo Domingo, después de haber sido bautizada Ciudad Trujillo por algún adulador.
La fascinación que aún ejerce ese período tétrico de la historia nacional se evidencia en que los libros sobre esa época están entre los más adquiridos por los asistentes a la XI Feria Internacional del Libro, que se celebra en estos momentos en esta isla.
Trujillo, monarca sin corona, y Sangre en el barrio del Jefe son dos de los títulos más solicitados por los miles de personas que han pasado por los torniquetes de la muestra, que se inauguró el pasado lunes 21.
Aunque los organizadores están satisfechos por la afluencia de público, los precios son materia de descontento pues en su mayoría están fuera del alcance de los compradores, agobiados por el alto costo de la vida.
Otra obra muy buscada, El fiero Eberto Lalane José, de Hamlet Herman, es un testimonio sobre el convulso período que siguió a la muerte de Trujillo, durante el cual fue liquidado el proceso democratizador iniciado por el derrocado presidente Juan Bosch.
Lalane José fue uno de los guerrilleros que junto al ex presidente coronel Francisco Caamaño enfrentó al gobierno de Joaquín Balaguer, ex ministro de Trujillo y un controvertido personaje de la historia contemporánea quisqueyana.
Ni siquiera la población haitiana se libró de la frialdad con que el ex dictador disponía de la vida humana con fines políticos: se estima que más de 10 mil personas de esa nacionalidad fueron eliminadas a fines de la década de los 30.
Trujillo y sus familiares se enseñorearon en la vida dominicana durante más de tres décadas hasta que una noche de mayo en 1961 fue abatido a tiros cuando se dirigía a su fastuosa residencia en la adyacente provincia de San Cristóbal.
La liquidación del dictador no fue sin embargo el final de su régimen de terror, continuado por su hijo Ramfis, un psicópata que antes de abandonar el país mató a tiros a los sobrevivientes del atentado contra su padre.
Tuvo que pasar algún tiempo para que cayeran las estatuas del hombre que se hacía llamar el Benefactor y que esta capital recuperara el nombre de Santo Domingo, después de haber sido bautizada Ciudad Trujillo por algún adulador.
La fascinación que aún ejerce ese período tétrico de la historia nacional se evidencia en que los libros sobre esa época están entre los más adquiridos por los asistentes a la XI Feria Internacional del Libro, que se celebra en estos momentos en esta isla.
Trujillo, monarca sin corona, y Sangre en el barrio del Jefe son dos de los títulos más solicitados por los miles de personas que han pasado por los torniquetes de la muestra, que se inauguró el pasado lunes 21.
Aunque los organizadores están satisfechos por la afluencia de público, los precios son materia de descontento pues en su mayoría están fuera del alcance de los compradores, agobiados por el alto costo de la vida.
Otra obra muy buscada, El fiero Eberto Lalane José, de Hamlet Herman, es un testimonio sobre el convulso período que siguió a la muerte de Trujillo, durante el cual fue liquidado el proceso democratizador iniciado por el derrocado presidente Juan Bosch.
Lalane José fue uno de los guerrilleros que junto al ex presidente coronel Francisco Caamaño enfrentó al gobierno de Joaquín Balaguer, ex ministro de Trujillo y un controvertido personaje de la historia contemporánea quisqueyana.
Fuente: PL
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